Dantas en el mundo
Ilustraciones Stephen Nash
En 2022 la Estación Danta inicia actividades científicas en territorio del máma kággaba Josemiguel Nuevita, región con actual presencia de las últimas dantas, tapires o bicha, Tapirus terrestris colombianos, Hershkovitz 1954 en la Sierra Nevada de Santa Marta La Guajira. Es la reacción a la emergencia de extinción local de esta especie por casería y transformación del hábitat de selva a potrero para ganado bovino. Desde este lugar se inicia un nuevo censo para conocer la condición cuantitativa actual de esta población, como punto de partida para el manejo in-situ orientado a establecer una nueva población de dantas en el Parque Tayrona donde hasta principios de siglo la danta existió y actualmente esta extinta para el Parque Natural Nacional. El objetivo es regresar una especie muy importante para la Ecología del Parque y al mismo tiempo establecer una población de este Perisodáctilo en área protegida, ya que las últimas dantas se encuentran afuera de los dos Parques Naturales Nacionales de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Colombia es el único país que actualmente tiene vivas y libres dentro de su territorio las tres especies de dantas o tapires de América y una nueva especie recientemente reportada, que produjo controversia (reporte que cuestiona el descubrimiento), para luego demostrar que no alcanza ser nueva especie de tapir (reporte que no acepta el descubrimiento), pero si resaltamos la noticia que de todas maneras produce asombro. La Fundación Nativa dedica su trabajo en la defensa de estos animales como especie CLAVE. Si dejamos de destruir el territorio de la especie mas grande, de paso se beneficia a la comunidad viviente que comparte con ella, incluso el hombre.
La danta, tapir o bitcha es el mamífero terrestre nativo más grande de Centro y Sur América, comparte ancestros con el caballo y el rinoceronte. En el mundo existen cuatro especies de dantas o tapires plenamente identificadas, en América (Tapirus terrestris, Tapirus pinchaque, Tapirus bairdii,) y una en Malasía e Indonesia (Tapirus indicus).
La presencia en Colombia de las dantas o tapires data desde la migración animal Norte - Sur de América al rededor de 2.5m.a., cuando el istmo de Panama inició a formarse de 15 a 13 millones de años. Con una gestación entre 13 - 14 meses y una sola cría, hace que su principal amenaza a la extinción sea la cacería, seguido de la destrucción de la selva primaria vital para la reproducción de esta especie.
Su presencia es un indicador de la salud de la selva, el papel como herbívoro dispersor especialista de semillas de muchas especies de árboles nativos y por otra parte por ser el herbívoro más grande tiene un efecto de control en aquellas semillas muy avundantes, la definen como diseñador determinante del bosque. De hábitos nocturnos y territorialistas, monógama de difícil observación en libertad.
La Danta de la Sierra Nevada de Santa Marta,
3°puesto Premio Conservación
de fauna silvestre.
La Danta de la Sierra Nevada del Caribe
Un mamífero con mucha historia por contar…
Descrita Tapirus terrestris colombianus por el mastozoólogo norteamericano Philip Hershkovitz en 1954, basado en un ejemplar macho joven capturado en el Departamento del Cesar, en la Sierra Nevada de Santa Marta. Hoy, esta sub-especie es posible encontrarla en algunas selvas de Boyacá, Santander, Norte de Santander, Cesar, Bolívar, Magdalena, Antioquia, Sucre, Córdoba, La Guajira y la Serranía binacional (Colombia - Venezuela) del Perijá y posiblemente el Chocó. La danta de la Sierra Nevada de Santa Marta es la mas amenazada de todas, al ser esta una población pequeña, aislada y rodeada por la fuerte presión humana.
El 21 de diciembre de 2007 se conoce la primera foto de la danta de la Sierra Nevada de Santa Marta en la reserva natural Buenavista, hecha por el antiguo cazador hoy conservacionista WIllian Peñaloza “Chapolo“, gracias a la Universidad Autónoma de México que donó tres cámaras fotográficas trampa análogas y el Tapir Preservation Found que aportó para la capacitación de campesinos e indígenas sobre el manejo de estas cámaras y su instalación en la selva. Así se logró la primera evidencia fotográfica, después del reporte de Ralf Strewe con Cristobal Navarro en el 2002 y Emilio Constantino sobre la presencia de la danta en La Guajira - Sierra Nevada de Santa Marta en 2005. Posteriormente, la Fundación Nativa junto con la ONG Defensores de la Naturaleza desarrollaron proyectos científicos con el apoyo de Corpoguajira, para conocer a estos animales por medio de estudios sobre la Distribución actual e histórica de la danta en la Sierra Nevada, Aportes al uso del hábitat y las primeras investigaciones genéticas de esta población.
El trabajo de la Fundación Nativa al rededor de la danta de la Sierra Nevada de Santa Marta durante los últimos 15 años ha permitido vivir la evolución del ambiente social y su incidencia en las selvas donde aún viven estos mamíferos. Al inicio del siglo XXI, el territorio entre las cuencas de los ríos Palomino y Rioancho en La Guajira estaban habitadas por indígenas, campesinos, grupos armados y dantas en sus selvas, prevalecía la economía de la cocaína. Esta condición dificultó la realización de investigaciones científicas en el terreno, sin embargo, el liderazgo del campesino local Carlos Fernandez Rueda hizo posible que los estudios se desarrollaran.
En efecto, muchos árboles fueron cortados para establecer cultivos de hoja de coca, en varios casos, bosques que se habían recuperado de la bonanza de la marihuana. La euforia armada por proteger este lucrativo negocio hacía entender que no era buena idea ir a las selvas a cazar, por la gran probabilidad de encontrarse con la muerte. Esta condición de guerra de cierta manera evitó la cacería de varias dantas durante mucho tiempo y de igual forma detuvo el crecimiento de la frontera ganadera.
El ambiente de miedo alcanzó niveles insospechados hasta que el Gobierno colombiano pudo controlarlo y eliminar los cultivos comerciales de la hoja de coca en los terrenos con la presencia de las dantas. Hoy la mayoría de campesinos vendieron sus posesiones de tierras a los indígenas, no hay guerra y los antiguos cultivos ilegales se transforman en potreros para el ganado bovino principalmente. Esta nueva realidad en los territorios de las dantas en la Sierra Nevada, deja ver la URGENCIA de activar una estrategia consecuente con la información científica y lo aprendido sobre los procesos sociales indígenas y campesinos que se dan en el lugar, para hacer detener la cacería, la destrucción de las selvas de la danta, garantizando su presencia saludable y propiciar actividades económicas en las comunidades de influencia que sean compatibles con la biodiversidad presente.
Territorio de la danta en la Sierra Nevada del Caribe
N
La información científica publicada junto con el continuo seguimiento en el terreno por la Fundación Nativa de la última y más amenazada población conocida de dantas en la Sierra Nevada, ha permitido diseñar el mapa de la localización actual de éste mamífero. El objetivo: Argumentar y lograr ante las autoridades competentes la ampliación del Parque Natural Nacional Sierra Nevada de Santa Marta, ya que el territorio de la danta no se encuentra protegido y es el último paraje donde las dantas o tapires pueden seguir sobreviviendo en el Macizo.
El 21 de Diciembre de 2006, primera foto con una cámara fotográfica análoga trampa, de la danta o tapir de la Sierra Nevada de Santa Marta Tapirus terrestris colombianus (Hershkovitz 1954).
En el 2011, se pudo obtener el primer registro en vídeo, con cámara video fotográfica digital trampa, de la danta o tapir de la Sierra Nevada de Santa Marta Tapirus terrestris colombianus (Heshkovitz 1954).
El 21 de Diciembre de 2015 se realizó la cuarta captura de una danta en la Sierra Nevada de Santa Marta para los estudios que permitan conocer el área de vida del mamífero nativo más grande de la Sierra Nevada.