Comenzando el 2006 la Fundación Nativa al lado del trabajo con las dantas de la Sierra Nevada tenía una exhibición de serpientes vivas en un serpentario educativo en Maloka – Bogotá. Uno de los visitantes se interesó mucho en los ejemplares y se inicio una conversación sobre biodiversidad colombiana con el veterinario responsable de las serpientes.
Francisco Botello mastozoólogo mexicano trabajaba cámaras trampa con venados y se encontraba de vacaciones por Bogotá en esos días, la conversación terminó con el ofrecimiento a darnos unas cámaras y enseñarnos a operarlas a cambio de que lo invitáramos a conocer las dantas de la Sierra Nevada del Caribe. En la foto Francisco Botello con un perro vinagre Speotus venaticus de la Sierra Nevada de Santa Marta.
En ese momento no había duda de la presencia de las dantas, ya que se habían fotografiado rastros frescos de dantas como huellas, trillo, ramoneo, letrinas y caminos, pero al conocer la posibilidad de hacer por primea vez la fotografía de la danta de la Sierra Nevada se convirtió en el propósito central de la Fundación Nativa.
Sheryl Tood del Tapir Preservation Found no dudó en enviar los pasajes al mastozoólogo Francisco Botello de la Universidad Autónoma de México para viajar a la Sierra Nevada de Santa Marta en Colombia y llevar tres cámaras trampa análogas para poder hacer la capacitación y fotografiar por primera vez a la danta de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Francisco Botello en el centro instalando una cámara en el árbol, a la derecha Jaime Rodríguez y a la izquierda William Peñalosa “chapolo”.
El curso de cámaras trampa con Francisco Botello de la Universidad Autónoma de México se pudo realizar, ofreciéndolo a los campesinos de Palomino en el territorio de la danta o tapir de la Sierra Nevada de Santa Marta. Los campesinos cazadores de Palomino – La Guajira, Jaime Rodríguez y William Peñalosa “Chapolo” fueron los primeros en recibir la capacitación, para de cazadores pasar a ser foto-colectores, logrando al mes la primera fotografía de la danta en la Sierra Nevada de Santa Marta por medio de cámara trampa análoga. El 20 de diciembre de 2006 se llevaron los tres primeros rollos de las cámaras trampa a FOTO-Japón en Riohacha para el 21 reclamar las primeras fotos del mamífero terrestre nativo más grande de la Sierra, la danta Tapirus terrestris colombianus Hershkovitz 1954.
Primera foto de Tapirus terrestris colombianus de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Segunda foto de Tapirus terrestris colombianus de la Sierra Nevada de Santa Marta.
La historia de las cámaras trampa en las selvas inicia con George Shiras III al final del siglo XIX, cuando se armaron dispositivos mediante cables que activados por los animales las cámaras hicieron fotos. En el siglo XX se realizaron los primeros estudios utilizando el método de cámaras trampa en tigres de las selvas de la India permitiendo entender que cada individuo tiene un patrón de rayas diferente que los identifica. Igualmente los primeros estudios de foto-trampeo en Colombia se realizaron con el jaguar en el Amazonas por Esteban Payan, resultados presentados en el Congreso Nacional de Zoología en el 2006, recuerdo que en ese mismo congreso realizado en Santa Marta nosotros pusimos un Poster para socializar que habían activas cámaras trampa en las selvas de la Sierra y que esperábamos la primera fotografía de la danta. Éste fue un gran logro, tomar las primeras fotografías de la danta de la Sierra Nevada realizadas por campesinos cazadores, ya que ellos son los que mas conocen a los animales pero ahora este conocimiento es puesto a disposición de la conservación, logrando con estas fotos de la danta de La Guajira llamar la atención de la Corporación Autónoma Regional de La Guajira CORPOGUAJIRA hasta el 2004, de esta manera aumentar el número de cámaras trampa, pero ahora digitales y con la capacitación y participación de los indígenas arhuacos que conviven en el territorio con las dantas.
Gracias a la gestión del líder indígena arhuaco “Chema” por propiciar la capacitación a representantes aruhacos de los pueblos de la Sierra que tienen danta en sus selvas, sobre el manejo de las cámaras trampa, se pudo hacer el foto-trampeo en la región de Sabanaculebra liderado por el arhuaco Gustavo Torres quien logró fotografías de dantas y muchos otros animales entre los que se destacan el jaguar y el paujil de pico azul, siendo las primeras fotos conocidas de estas especies en la Sierra Nevada de Santa Marta y, en la región Wiwa de Gómaque en la cuenca del río Jeréz en la localidad llamada Peñón Colorado donde también por medio del Wiwa José Armenta se fotografiaron dantas.
Foto: Wiwa José Armenta
Foto: Arhuaco Gustavo Torres
Estos desarrollos de monitoreo fotográfico de animales de la selva hechos por campesinos, arhuacos y wiwas en una época de intenso conflicto, es un logro meritorio de la comunidad por asumir esta labor, sabiendo que en esa misma selva habitaba la guerra. Por un momento el monitoreo llegó a ser de alto riesgo por lo que fue necesario una estrategia de comunicación local sobre el foto-trampeo para proteger a los foto-colectores del proyecto y de manera abierta desligarnos completamente de cualquier posibilidad con la guerra, por lo que se realizó el primer festival de la danta en la localidad de Palomino, que consistió en una exposición de las fotografías de los animales de la selva en la Sierra Nevada de Santa Marta hechas por la misma comunidad campesina e indígena y puestas en exposición durante todo el día en el parque central del pueblo de Palomino, para que la comunidad local entendiera el trabajo de conservación que se estaba realizando con la danta y de esta manera despejar las posibles dudas sobre nuestra motivación para estar en el “teatro de operaciones militares” las selvas primarias.
Con esta experiencia, fuimos invitados por el agricultor Héctor Males de la Vereda La Castellana en San Agustín Huila, líder en ese entonces del grupo de monitoreo Los Caminos de la Danta, a instalar por primera vez cámaras trampa para la danta de páramo Tapirus pinchaque Roulin 1829. Fue así que se pudieron hacer las primeras fotos de esta especie de danta en el Macizo Colombiano.
Para el caso de la Sierra Nevada del Caribe, las cámaras trampa siguen siendo de gran valor en el monitoreo de las últimas dantas o tapires y fuente de información que mantiene activa la presencia indígena en la conservación de la biodiversidad adquiriendo visibilidad como comunidad y protagonismo en el destino de sus territorios.
La realidad de las selvas de la Sierra Nevada es que tiene nuevas amenazas que hacen parte del mundo lícito como la ganadería, agricultura, reforestación para madera, minería, electricidad, turismo, haciendo de este último aspecto el que puede llegar a tener la posibilidad para orientar su fuerza de tal manera que privilegie la biodiversidad como la base filosófica de esta actividad comercial de turismo, pero aún estamos lejos y el reto es lograrlo.
La nueva realidad de las selvas que dejó el conflicto transformadas en potrero con ganado.
Para la Sierra tener dantas es más importante que tener vacas. fotos del Tapir tour.
La Fundación Nativa sigue instalando cámaras trampa en el territorio de las últimas dantas por medio del kogi Juan Nuevita quien es el fotocolector que a los interesados en hacer el Tapir Tour los lleva por los caminos de la danta para instalar las cámaras trampa, ver sus huellas frescas y posiblemente hacerle una foto. De esta manera descubren las últimas selvas primarias con dantas en la Sierra de 100 millones de años, la más antigua del continente.
Foto : Cyril Ruoso. Juan Nuevita, fotocolector kággaba de la danta de la Sierra.